Actualmente, WWE tiene una buena colección de talentos que representan el legado del pancracio y de la figura de Eddie Guerrero. La victoria de Kalisto sobre Enzo Amore para conseguir el Campeonato de Peso Crucero ha supuesto una grata noticia para el talento hispano de EEUU, pero más allá de esto, quizá no se haga justicia a un estilo y «raza» que nunca goza de mucha aceptación por parte de Vince McMahon. Sin Cara es un ejemplo de ello, aunque su actitud tras bambalinas, con el suceso con Chris Jericho el año pasado a la cabeza, no ha hecho favor alguno a su ascenso.
Jorge Arias, el hombre tras la máscara, concedió ayer una entrevista con Sports Illustrated, donde por primera vez, hizo referencia a dicha pelea real con el canadiense que, según los reportes, lo marginó del vestuario de Raw y obligó a pasar por terapia de control de su ira. Aunque Y2J quitó hierro al asunto cuando poco después utilizó la máscara del luchador durante una edición de Raw, la otra parte implicada no se había expresado hasta ahora.
«Jericho y yo somos buenos amigos. Él me pidió poder usar una de mis máscaras para aquel segmento, y yo le dije que sería un honor. No hay tensión entre él y yo. Hoy día, con las redes sociales, siempre hay muchos rumores, pero nos llevamos bien. Por eso le presté mi máscara. Si hubiera sido así, le hubiera dicho que no».
Pero también hubo hueco para otros asuntos, como la llegada de Amore a 205 Live y el descontento (real) de buena parte de la división:
«Para serte sincero, no estoy seguro, exactamente, de lo que está pasando. Quizá ellos piensan que él no ha tenido suficiente trayectoria para tener el éxito que está teniendo, pero ¿quién soy yo para juzgar? Sólo puedo hablar de mí mismo. Lo único que puedo decir es que le deseo lo mejor. Por suerte, esto ayuda a su carrera y lo hace mejor, no con sus promos, sino también con su trabajo sobre el ring».
Sobre si algún día lo veremos luchar sin máscara, Arias lo tiene bastante claro:
«Sinceramente, me siento en casa cuando llevo una máscara. Me siento en paz. Sin ella, siento que me falta algo. Es un poco raro pensar así, pero se convierte en parte de ti cuando la llevas puesta. Lo divertido de Eddie Guerrero es que fue el primer luchador profesional que se quitó la máscara voluntariamente. Él solía luchar enmascarado, y tuvo éxito sin ella. Pero a mí me encanta llevar máscara. Para Eddie, supongo que fue importante quitársela. No me importa ser reconocido. Quiero que la gente reconozca la máscara, no a mí«.
Pueden leer la entrevista íntegra de Sports Illustrated a Sin Cara aquí.
Todos los luchadores latinos siempre tienen que mencionar a eddie guerrero, ya déjenlo descansar cabrones
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